El gobierno federal alemán ha confirmado un aumento sin precedentes en la financiación de los cursos de integración, elevando la asignación total para 2025 a 1.066 millones de euros. Esto se produce tras la considerable incertidumbre que existía a principios de año sobre si habría suficientes recursos financieros para continuar con los programas de idiomas y orientación, esenciales para las personas refugiadas y migrantes de todo el país.
La decisión se produce tras la aprobación oficial por parte del Ministerio Federal de Finanzas de un gasto adicional de 302.8 millones de euros, además de los 763 millones previstos previamente. Con esta medida, el gobierno supera el gasto del año pasado y reafirma su compromiso con las medidas de integración, en particular la adquisición de idiomas y la orientación social para los recién llegados.
Aumento de la participación impulsado por los refugiados ucranianos
Solo en los primeros cuatro meses de 2025, más de 122,800 personas se inscribieron en cursos de integración en toda Alemania. Esta cifra sugiere que la participación total podría superar de nuevo las 360,000 personas para finales de año, en consonancia con la alta demanda observada en 2024. Durante ese período, participaron en los cursos más de 363,000 personas.
La mayoría de los participantes siguen siendo personas que huyen de Ucrania, seguidas de las de Siria y Afganistán. Los ciudadanos ucranianos han constituido el grupo más numeroso desde el inicio de la invasión rusa en 2022, representando más del 32 % de los asistentes en 2024.
Estructura del curso y opciones de expansión
Los cursos de integración suelen constar de 600 horas de alemán, seguidas de un programa de orientación de 100 horas que abarca aspectos esenciales de la sociedad, la historia y las normas jurídicas alemanas. Para atender las diversas necesidades de los migrantes, la Oficina Federal de Migración y Refugiados (BAMF) también ofrece variantes de cursos intensivos y ampliados. Estos incluyen programas de idiomas ampliados de hasta 900 unidades y programas intensivos de 400 horas de formación lingüística para las personas que cumplen los requisitos.
Los cursos suelen tener una duración aproximada de nueve meses. Sin embargo, la demanda ha provocado un aumento en la cantidad de participantes que repiten el curso. En 2024, más de 103,000 XNUMX personas repitieron el programa para mejorar sus conocimientos de idiomas o para satisfacer las necesidades del mercado laboral.
Se critica el apoyo político y el retraso en la planificación
Clara Bünger, diputada del Bundestag y portavoz de La Izquierda para Asuntos de Interior y Refugiados, celebró el aumento de la financiación. Subrayó que garantizar el acceso al apoyo lingüístico y a la integración hasta 2025 es fundamental para la participación social y la cohesión a largo plazo.
Sin embargo, Bünger también criticó la demora en la confirmación de los fondos, señalando que la incertidumbre podría haberse evitado con una planificación financiera más temprana. Subrayó que la integración nunca debe ser un tema de vacilación, ya que el idioma es un pilar fundamental de la inclusión en cualquier sociedad.
Presión presupuestaria a largo plazo debido a las crecientes necesidades
Si bien el aumento de la financiación garantiza la estabilidad para este año, también refleja la creciente presión fiscal en respuesta a los cambios en los patrones migratorios. A diferencia de 2021, cuando se gastaron menos de 500 millones de euros durante la pandemia, las necesidades actuales se han más que duplicado.
La falta de un presupuesto federal definitivo debido al colapso del gobierno de coalición y las próximas elecciones complicó aún más la situación, lo que hizo aún más significativa la financiación adicional confirmada. Se espera que los responsables políticos de todos los partidos debatan cómo los futuros presupuestos integrarán el apoyo continuo a la migración y la integración.
La inversión sostenida indica un cambio de prioridades
Al superar el umbral de los mil millones de euros por segundo año consecutivo, Alemania señala un cambio hacia una inversión sostenida y a gran escala en infraestructura de integración. Este avance subraya el reconocimiento del país de que la estabilidad a largo plazo, el acceso al mercado laboral y la armonía social dependen en gran medida de una educación lingüística temprana y constante.
Como muestran las cifras, es improbable que la demanda disminuya a corto plazo. El sistema de cursos de integración, considerado durante mucho tiempo un pilar de la política migratoria alemana, se está reforzando para satisfacer las cambiantes necesidades demográficas y sociales del país.