Francia introduce una prohibición generalizada de fumar al aire libre
Francia ha implementado una de las medidas antitabaco más estrictas de Europa al extender la prohibición de fumar a una amplia gama de espacios públicos al aire libre. Desde esta semana, fumar está prohibido no solo en lugares de trabajo, transporte público y parques infantiles, como venía siendo habitual, sino también en playas, parques, paradas de autobús, cerca de escuelas, bibliotecas, piscinas e incluso frente a instalaciones que albergan a menores. La medida busca reducir la exposición al humo de segunda mano y disuadir a niños y adolescentes de adquirir este hábito.
La ley entró en vigor tan solo un día después de su publicación en el boletín oficial del gobierno, sorprendiendo a muchos. Si bien se espera que la aplicación inicial sea moderada, los infractores se enfrentan a una multa de 135 euros. Fumar en vehículos particulares con niños presentes ya conllevaba una multa considerable de hasta 750 euros.
Los cigarrillos electrónicos y fumar en las terrazas de restaurantes y cafés siguen estando exentos según las nuevas normas.
El Gobierno aspira a una generación libre de humo
La medida forma parte de una estrategia de salud pública a largo plazo para crear lo que la ministra de salud francesa, Catherine Vautrin, llama una "generación libre de tabaco" para 2032. Según el gobierno francés, el 90 por ciento de los fumadores comienzan a consumir tabaco antes de cumplir los 18 años. La prohibición se considera un ataque preventivo contra la adicción temprana a la nicotina, con un claro énfasis en proteger a los menores de la influencia nociva y del humo de segunda mano.
Francia registra aproximadamente 75,000 muertes anuales relacionadas con el tabaquismo, además de hasta 5,000 muertes causadas por el tabaquismo pasivo. La carga financiera para el sistema público de salud también es considerable, estimándose en 156 millones de euros al año.
Amplio apoyo público en Francia
Una encuesta reciente reveló que el 62 % de la población francesa apoya la prohibición. Si bien algunos críticos argumentan que la medida atenta contra la libertad personal, muchos ciudadanos la aplaudieron, especialmente padres y profesionales de la salud. Para ellos, la decisión representa un avance significativo en la política de salud pública y en el derecho de los niños a un aire limpio.
Aumenta la presión sobre Alemania para que actúe
La prohibición francesa ha reavivado el debate en Alemania, donde las regulaciones sobre el tabaco siguen siendo inconsistentes y fragmentadas en los 16 estados federados del país. Si bien está prohibido fumar en la mayoría de los espacios públicos interiores, como edificios gubernamentales, hospitales e instituciones educativas, no existe una normativa nacional que prohíba fumar en áreas al aire libre frecuentadas por niños.
En Renania del Norte-Westfalia (NRW), por ejemplo, existe una prohibición total de fumar en espacios cerrados desde 2013, aunque fumar sigue siendo legal en terrazas y cervecerías al aire libre. En Alemania, las prohibiciones de fumar al aire libre son poco frecuentes y suelen limitarse a eventos o municipios específicos, como los festivales al aire libre en la ciudad de Holzwickede.
La opinión pública alemana parece dividida. Si bien muchos usuarios de redes sociales exigieron medidas similares a las de Francia, otros expresaron su preocupación por el exceso de regulación y la viabilidad de su aplicación.
Expertos en salud y grupos de defensa piden reformas
Profesionales médicos y grupos de defensa han instado a los legisladores alemanes a introducir regulaciones más estrictas. La Sociedad Alemana de Medicina Pediátrica y Adolescente (DGKJ) y la Sociedad Alemana del Cáncer elogiaron la estrategia francesa, afirmando que sienta un precedente valioso. Destacaron la importancia de proteger a los niños, las mujeres embarazadas y las personas con enfermedades crónicas o alergias de la exposición al humo de tabaco en espacios públicos.
Stephan Weinberger, presidente de la organización antitabaco Pro Rauchfrei, argumentó que fumar al aire libre puede exponer a los presentes a sustancias nocivas, especialmente en entornos concurridos. También sugirió que fumar en público de forma visible normaliza el hábito y aumenta su atractivo entre los adolescentes.
La Bundesverband der Tabakwirtschaft (BVTE), la asociación alemana de la industria tabacalera, criticó la decisión francesa, alegando que representa un cambio de la protección de los no fumadores a la marginación de los fumadores. Sin embargo, en Alemania está cobrando impulso, y varios políticos del SPD y del Partido Verde abogan abiertamente por regulaciones basadas en el modelo francés.
El consumo de tabaco sigue estando muy extendido en Alemania
A pesar de un descenso a largo plazo en las tasas de tabaquismo desde la década de 1980, Alemania aún registra cifras preocupantes. Una encuesta nacional reciente reveló que el 28.3 % de los adultos fuma. Entre los jóvenes de 14 a 17 años, el consumo de tabaco casi se ha duplicado desde 2021, alcanzando actualmente el 15.9 %. La Oficina Federal de Estadística de Alemania también informó de un aumento en el consumo de cigarrillos per cápita, de 758 cigarrillos por persona en 2023 a 784 en 2024.
Igualmente preocupante es el drástico aumento del consumo de cigarrillos electrónicos de un solo uso, que ascendió a 60 millones de unidades anuales en Alemania desde 2022. Las autoridades sanitarias advierten que estos dispositivos a menudo actúan como una puerta de entrada a la adicción a la nicotina y conllevan sus propios riesgos para la salud.
Alemania registra aproximadamente 110,000 muertes relacionadas con el tabaquismo cada año. El coste económico para el sistema público de salud se estima en unos 79 millones de euros anuales, según el Centro Alemán de Investigación del Cáncer.
La voluntad política sigue siendo desigual
La nueva ministra federal de salud de Alemania, Nina Warken, ha instado públicamente a los estados a armonizar sus leyes de protección de los no fumadores e incorporar los cigarrillos electrónicos al marco vigente. Enfatizó que los aerosoles nocivos de los vapeadores suelen subestimarse e instó a una acción legislativa rápida, especialmente para proteger a los menores.
A nivel de la UE, la Comisión Europea ha recomendado restricciones más estrictas para fumar en exteriores, especialmente en zonas de juegos infantiles, estaciones de transporte público y comedores al aire libre. Sin embargo, el año pasado, el Parlamento Europeo votó en contra de la introducción de más zonas libres de humo en toda la Unión.
En cambio, el Reino Unido ya ha tomado medidas audaces. En 2024, aprobó una ley que prohíbe permanentemente la venta de cigarrillos a cualquier persona nacida después de 2009 y prohibió fumar cerca de escuelas, hospitales y parques infantiles.
El futuro de la salud pública en Europa depende de las políticas
Mientras Francia establece un nuevo estándar para el control del tabaco en espacios públicos, otras naciones europeas, incluida Alemania, se enfrentan a una creciente presión para seguir su ejemplo. El debate continúa sobre dónde trazar la línea entre la libertad personal y la responsabilidad en materia de salud pública. Pero ante la creciente evidencia de daños, especialmente en poblaciones vulnerables, la demanda de acciones decisivas se hace cada vez más fuerte.